“Realmente la idea de la serie surge en una comida entre amigos. Me habían propuesto preparar una serie de ficción. Se lo comenté a David para ver qué le parecía la idea y él me dijo que el mejor personaje que conocía para que yo interpretara en ese momento era… yo mismo”.  

“Al principio me costó un poco asimilar eso. Y sobre todo las situaciones creadas para la serie que a veces son  muy comprometidas. Hasta que yo asimilé que esto tenía que servir para reírme mucho de mí mismo. Costó un poquito, la verdad”.     

“Además, desde que he rodado esto, no quiero hacer otra cosa. Todo es fácil, divertido. Somos un equipo pequeño que lo hacemos todo. Después de hacer esto, cualquier otro personaje me da pereza. No quiero hacer del secretario del presidente del Gobierno o de un tío normal. Este es el personaje que yo quiero hacer”.  

“La serie es una demostración de amor de David a los actores, al personaje y a la industria. La demostración de amor más dolorosa que ha habido nunca, pero amor al fin y al cabo”.  

"Retomarla después de cinco años ha sido un regalo. Hemos podido incorporar nuevos personajes y nuevas presencias, que no solo se identificaban con la serie, sino que la reconocían como uno de los pocos retratos sinceros del mundo del artista".

Jorge Sanz