El cardenal

El obispo norteamericano Stephen Fermoyle (Tom Tryon) va a recibir el capelo cardenalicio en el Vaticano. En el momento solemne que le hacen públicos los documentos papales en los que se concede tal dignidad, Stephen Fermoyle rememora los acontecimientos que más hondamente han marcado su vida, su nacimiento e infancia en Boston, cuando se ordenó sacerdote y fue destinado como ayudante de coadjutor a una parroquia situada en una de las zonas más inhóspitas del país. Recuerda como, al terminar sus estudios en Roma, el cardenal que había sido su profesor le vaticinó que algún día él también sería purpurado, un príncipe de la Iglesia Católica. Tras la muerte del párroco, el joven cura es reclamado por el cardenal-obispo de Boston, con el que trabaja, y se va introduciendo en el complejo mundo de las relaciones internacionales de la Iglesia. Tras dos años de dispensa eclesiástica para reafirmar su vocación sacerdotal, el joven sacerdote vuelve a su ministerio.