Episodio 6: Urquijo

Laia logra que Álex le entregue a su tío quien a su vez colabora con ellos poniendo escuchas en una comida con todos los altos cargos investigados. La operación no puede salir mejor y Laia empieza los trámites para entregar sus cabezas. Pero esa noche dos hombres encapuchados le roban toda la información del caso y le dan una paliza. Mientras, los seis antidisturbios se reúnen en una cena que acaba en una borrachera que deja salir todo lo que unos y otros han callado en estos meses de tensión. Diego se sorprende a sí mismo abandonando el restaurante para siempre: sus compañeros ya no son su familia. Laia sabe que el responsable del robo ha sido Revilla. Tras un encuentro lleno de tensión y amenazas, hacen un trato: él le devuelve el caso a cambio de que ella le entregue cierta información de Asuntos Internos. Los antidisturbios quedan libres, aunque nunca sabrán que ha sido gracias a que Laia ha vendido su alma al diablo, y siguen con sus vidas: mientras Diego ha dejado la policía y ahora es guardia de seguridad, sus excompañeros, cada uno con sus miserias y heridas internas, se encaminan hacia una nueva misión que va a durar mucho más de lo creen.