Cuentos de Tinga... (T1): ¿Por qué Oruga nunca tiene prisa?

Veréis, Oruga nunca tenía prisa. Cuando todos se apresuraban para ir al Desfile del animal más elegante, Oruga estaba tranquilamente comiendo hojas de un árbol y diciendo: "Pole, pole, despacio, despacio, lo bueno se hace esperar". Un día, empezó a llover y Oruga se convirtió en una crisálida. "¿Qué le pasará?", preguntó Elefante. "Espera y verás", respondió sabiamente Tortuga. Y Oruga se convirtió en una mariposa preciosa. Pero, ¿quién ganó el Desfile del animal más elegante? Historias de África.