Doraemon y los dioses del viento

Doraemon y Nobita tienen una nueva amiga, Fuuko, una pequeña dragona. Fuuko viene del Valle del Viento, un lugar mágico en el que la energía eólica es el motor de todo y a donde viajará la pandilla, gracias a los inventos de Doraemon.

Una vez allí, los chicos descubrirán como los habitantes del lugar, los Domadores del Viento, han aprendido a usar las propiedades del viento, aplicándolas de una manera respetuosa, en su día a día. Pero aparte de ellos, también existen los malvados Tempestades, defensores de todo lo contrario, y que causarán muchos problemas en el valle. Con lo que no contaban los Tempestades es con Doraemon y compañía, que ayudarán a los Domadores a imponer su respeto al viento.